- Felicitamos a la Dra. Claudia Sheinbaum por asumir su cargo como la primera Presidenta de México
- Queremos lo mismo: que las niñas y los niños mexicanos desarrollen su potencial y sean felices
- Hay prioridades en la primera infancia que requieren su atención inmediata en cuanto a pobreza, salud y seguridad
CIUDAD DE MÉXICO, a 1 de octubre de 2024.- El Pacto por la Primera Infancia y las 500 organizaciones de la sociedad civil que lo conformamos felicitamos a la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo por asumir el cargo como Presidenta Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.
Nos alienta el compromiso que asumió con los más de 12.4 millones de niñas y niños de 0 a 6 años en México, con la firma del Pacto por la Primera Infancia el pasado 22 de abril. Estamos listas para trabajar con ella y su gobierno para lograr el bienestar y felicidad que toda niña y niño merecen, como bien lo apuntó siendo candidata.
Hoy en México los más pobres entre los pobres son las niñas y los niños menores de 6 años; por ello, afirmamos que el Gobierno que hoy inicia deberá reconocerles como una prioridad. Estas niñas, niños y sus familias requieren de manera urgente a un Gobierno de territorio, que reconozca sus derechos y trabaje de manera eficaz para garantizarlos. La atención integral, prioritaria y urgente a estas niñas y niños es un tema de justicia social e intergeneracional ineludible, y la clave para una sociedad más igualitaria y pacífica.
La llegada de una mujer al cargo público más alto del país nos emociona y nos llena de esperanza. Por fin tenemos una Presidenta que comprende y ha vivido en carne propia que el bienestar de las niñas y los niños no es un asunto doméstico o del ámbito de lo privado; por el contrario, sabe que el desarrollo pleno de la niñez, su protección y cuidado, y el apoyo a las familias que los crían es un asunto que debe ocupar el lugar más alto de la agenda y el interés público. Por ello, confiamos en que su palabra será un mandato para todo el Gobierno, y que su liderazgo asegurará que se cumplan las 12 Metas que componen el Pacto por la Primera Infancia, el cual firmó siendo candidata:
“Firmo este Pacto por la Primera Infancia por diversas razones: Primero porque creo que como mujeres tenemos una visión de protección, muy especial, por haber sido madres y por tener una relación especial con los niños y niñas, particularmente de la primera infancia. Siempre dije que, si no hubiera sido científica, si no estuviera en la política, probablemente me hubiera dedicado a ser maestra de jardín de niños porque siempre tuve una conexión especial con las niñas y los niños”, apuntó.
Las 12 metas firmadas por la Presidenta de México se constituyen hoy, en su toma de posesión, en una agenda nacional de primera infancia. Cada una de estas metas debe cumplirse al llegar al 2030. Todos los actores y todos los sectores debemos recordar permanentemente el compromiso que hizo la Presidenta, y comprometernos como ella lo hizo a trabajar juntas para asegurar su cumplimiento.
El Pacto que firmó, comprende las siguientes metas:
Salud y nutrición
- Para niñas y niños de 1 y 2 años, inmunizar por lo menos al 90% a través de la aplicación del esquema de vacunación prescrito.
- Para las niñas y niños en la primera hora de vida, incrementar a 75% la lactancia y en niñas y niños menores de 6 meses, aumentar a 50% la lactancia materna exclusiva.
- Para menores de 5 años, reducir la desnutrición crónica por lo menos al 8%, y la anemia y la prevalencia de sobrepeso y obesidad al 5%.
- En niñas y niños recién nacidos, aplicar el tamiz neonatal por lo menos al 90%; brindarles, en su caso, atención especializada a partir del diagnóstico; y para niñas y niños con discapacidad llevar al 80% la cobertura en servicios de salud y educación.
- Para las niñas y niños menores de 5 años, incrementar a 90% la proporción con un adecuado desarrollo infantil temprano y a 50% la cobertura de evaluaciones anuales de desarrollo.
Educación y cuidados
- En niñas y niños menores de 3 años, incorporar por lo menos al 20% a la educación inicial en cualquiera de sus modalidades.
- Para las niñas y niños a partir de los 3 años, asegurar que al menos 85% reciba educación preescolar de calidad.
- Para las familias con niñas y niños menores de 6 años, alcanzar al 30% de ellas con programas de habilidades parentales para una crianza cariñosa y sensible.
Protección
- Para las niñas y niños antes de cumplir 1 año, lograr que el 90% esté inscrito en el registro civil y que a los 5 años esté registrado el 100%.
- Para la erradicación de las violencias contra la infancia, al disminuir en 20% el uso de métodos violentos de disciplina y para niñas y niños menores de 6 años reducir en 50% la violencia sexual y las desapariciones.
Bienestar
- Para niñas y niños menores de 5 años, incrementar en 10% la participación de sus madres y padres en actividades de juego, así como la disponibilidad, acceso y calidad de espacios públicos para el juego de la primera infancia.
- La consecución de estas metas, junto con las intervenciones propias de otras políticas públicas, contribuirá a que la primera infancia vea reducida 8 puntos porcentuales su participación en la pobreza y 3 puntos en la pobreza extrema.
Lograr estas metas requiere de políticas públicas que aseguren a cada niño y niña y sus familias el tránsito por una ruta muy concreta de atenciones, bienes y servicios. En otras palabras, hay que asegurar, entre otras cosas, que las mujeres accedan a controles de embarazo y suplementos adecuados, que el nacimiento ocurra en las mejores condiciones, que las mujeres reciban apoyo para amamantar, que las niñas y niños sean tamizados al nacer, que se registren de manera inmediata, que les pongan sus vacunas cuando corresponde, que vigilen su nutrición y desarrollo de manera periódica, que la familia participe en programas para mejorar sus habilidades parentales, así como en programas de desarrollo infantil o de educación inicial, y que todos los niños y las niñas entren al preescolar a los 3 años.
Asegurar estos servicios empieza por asegurar que la Presidenta incluya en el Plan Nacional de Desarrollo los programas sectoriales, especiales y presupuestales que de él deriven una mirada clara hacia la primera infancia y los servicios que debe recibir. De manera adicional, será indispensable asignar y visibilizar el presupuesto que se requiere para garantizar estos servicios, y asegurarnos que con esa inversión estamos impactando de manera concreta la vida de las niñas y los niños. La mejor forma de hacer eso es monitorear permanentemente los indicadores sobre el ejercicio de los derechos de la niñez temprana.
No es necesario empezar desde cero. Contamos con un Sistema de Protección Integral de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes; una Comisión de Primera Infancia y, además, una Estrategia Nacional de Atención a la Primera Infancia, construida en el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Asimismo, algunas de las propuestas que la Presidenta realizó durante su campaña son elementos indisolublemente ligados a estos propósitos, como la afiliación universal al Servicio Público de Salud para el Bienestar, el Programa de Mil Días, el Sistema de Cuidados, los centros públicos de educación inicial y la ampliación de las licencias de maternidad y paternidad, entre otros.
Presidenta Claudia Sheinbaum, coincidimos con sus palabras durante la firma de este Pacto y las asumimos como propias: “Si nosotros no atendemos, protegemos, cuidamos, nutrimos, alimentamos, les damos la posibilidad de jugar y de ser felices a los niños y a las niñas, después no tendremos los ciudadanos que necesita nuestro país”.
Nuestro llamado es a trabajar como nación para cuidar, proteger y desarrollar a nuestras niñas y niños hoy. Con ello, transformaremos a este país desde sus cimientos, y haremos de México el mejor lugar para nacer.
¡Enhorabuena, Presidenta Claudia Sheinbaum!
