Hacemos un llamado a todos los partidos, frentes y coaliciones a reunirse con el Pacto por la Primera Infancia para trabajar conjuntamente sus propuestas en beneficio de la niñez temprana.
Cualquier proyecto de nación que aspire a construir una sociedad más justa, equitativa, saludable, pacífica, productiva y próspera debe empezar por poner a las niñas, a los niños y a sus familias en el centro, en particular, a aquellas que tienen a su cargo la crianza de personas menores de 6 años.
La evidencia indica que si logramos proveer a todas las niñas y niños de salud y nutrición adecuados, protección frente a la violencia, oportunidades de aprendizaje y un cuidado cariñoso y sensible en sus primeros años de vida, estaremos emprendiendo acciones altamente efectivas para disminuir la pobreza, la desigualdad, el bajo aprovechamiento escolar, la baja escolaridad, la baja productividad, la criminalidad, la violencia, las enfermedades de salud mental y la carga por enfermedad asociada a enfermedades crónicas no transmisibles.
Además, estaremos detonando el potencial que hemos desperdiciado históricamente al ignorar, invisibilizar o marginar de las responsabilidades del Estado de garantizar a cada niño y niña un desarrollo pleno e integral mediante el disfrute efectivo de todos sus derechos.
En el Pacto por la Primera Infancia trabajamos por lograr que las personas que nos quieren gobernar se comprometan a hacer de la niñez temprana una prioridad.
